Junio 2016
El mes de junio
pareciera vincular fechas de profunda significación histórica y geopolítica de
un extremo a otro de nuestro país.
Fechas que
necesariamente deben ser articuladas, no sólo en su conmemoración sino, en el
claro y profundo mensaje que en forma unitiva debe ser considerado.
El 10 de junio
fue instaurado como “Día de la Afirmación de los Derechos Argentinos sobre las
Malvinas, islas y Sector Antártico”. El 21 “Día de la Confraternidad
Antártica”. El 20, día del único
estandarte que con su manto azul y blanco cubre toda la geografía argentina:
nuestra Bandera Nacional.
A ello se agrega
nuestro propio 17 que en este año 2016 fuera recientemente elevado a categoría
nacional. Nuestro General Güemes cuyo bautismo de fuego no fue precisamente en
los montes y cerros norteños. Como paradoja del destino, nuestro General
ingresa en los libros de la historia en las aguas del Río de la Plata, con la particular acción bélica de la toma de
la fragata inglesa “Justina”, logrando
su incondicional rendición y entrega de sus banderas durante las invasiones de
la “pérfida Albión”.
Nuestro General
que hoy haría temblar a las “Higuerillas” si se enterase lo que ocurre en las
aguas que con sus gauchos de a caballo defendieron, cimentaron y dieron su vida
por nuestra soberanía geográfica.
Las noticias que
nos llegan de las aguas del Plata en su fusión atlántica, noticias de la “Banda
Oriental” indudablemente revolverían de su tumba a Don Martín.
El periódico
chino La Gran Época en artículo de Fabio Santoro nos comunica de la creación de
una virtual “zona franca pesquera” en Uruguay. Ocurre que la compañía ShanDong
BaoMa, la compañía más importante de China en la fabricación y almacenamiento
de harina de pescado, construiría un puerto pesquero con una inversión de 200
millones de dólares. El gerente de la firma Jiang Hongjun nos dice que el
objetivo principal es construir una “base logística para la reparación,
mantenimiento y suministro de recursos materiales para sus flotas pesqueras del
Atlántico Sur”.
El analista Milko
Schvartzman nos advierte: “China literalmente pasaría a tener soberanía en el
Río de la Plata, una ventaja logística y comercial que se transformaría en un
atractivo extra para las flotas pesqueras migratorias”.
En estos momentos
Uruguay es el eslabón principal de la
pesca ilegal del Atlántico Sur. El
descomunal proyecto a ejecutar incluye muelles, astilleros de fabricación y
reparación de barcos, fábrica de hielo, depósitos de petróleo, edificios,
oficinas, viviendas.
Abundar en
comentarios sobre la actual indefensión de nuestro mar, de la cantidad de
barcos factorías que depredan nuestro litoral marítimo con licencias
británicas, es una redundancia que nuestros funcionarios prefieren ocultar y
nuestra prensa silencia sin contemplación alguna.
Foto NASA detalle de la zona pesquera Malvinas brillando más que la ciudad de Buenos Aires |
Horizonte maritimo nocturno del sur argentino luces de pesqueros depredadores. |
Por lo visto “las
ciudades flotantes” al contar con el apoyo logístico uruguayo, que se suma al
apoyo inglés en Malvinas, arrasarán con
la riqueza más preciada de nuestra “Patagonia
Sumergida” sin contención alguna.
Mientras este
avance inexorable se lleva a cabo, la Canciller Malcorra se suma al silencio
cómplice de la consentida entrega soberana que ya sin ningún disimulo nos es
arrebatada.
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