Argenchina
Por Javier Cornejo
Artículo publicado en el diario El Tribuno el 26 de septiembre de 2011
Luego de terminada la cruenta Guerra de Malvinas (no “conflicto” como se minimizó deliberadamente por motivos que oportunamente serán explicitados) y firmados los tratados de 1990, aparentemente reinó la paz en la región. Una vez promulgada la Constitución de las Falkland, comenzó el arribo de las plataformas petroleras y el artillado del sector, hasta llegar en la actualidad a una sofisticación sin igual.
Coincidentemente como consecuencia de los tratados referidos, la desintegración
de las Fuerzas Armadas argentinas se cumplió inexorablemente. Militarmente no
existimos. Entonces, ¿con qué motivo el imperio británico lanzó semejante
carrera armamentista siendo Argentina una hipótesis de conflicto totalmente
nula? La respuesta la encontramos el 25 de junio de 2010, fecha en que el
Estado chino respaldó a Argentina en el Comité de Descolonización de la ONU, en
forma expresa y a “viva voz”, en su reclamo a Inglaterra por la ocupación del
sur argentino.
En forma silenciosa se intensificó la interrelación con China, al extremo que
en la actualidad nuestra economía agroexportadora y, por consiguiente, el
sustento del “modelo K” dependen en forma exclusiva de Hu Jintao. Por otra
parte, la seducción gubernamental motivó la instalación de “inversiones” chinas
(bocas de succión) en 23 provincias.
El Estado depredador chino fue motivo de análisis en numerosas columnas anteriores a las que remito al lector para una comprensión cabal del tema. Así también recomiendo la lectura del artículo de Andrés Oppenheimer -publicado por el El Tribuno en la pág. 16 del 9/9/11- “El fin del idilio con los chinos”.
Por lo expuesto, es dable inferir que el armamento del sector antártico por
parte del imperio británico es una clara advertencia a China de que tales
territorios no piensan ser negociados. El 8/9/11 el canciller Timerman, desde
China en reunión con el vicepresidente chino Xi Jinping (seguro próximo jefe de
Estado), anunció la firma del contrato para la refuncionalización del Belgrano
Cargas con préstamo chino a devolver en 19 años de 2.500 millones de US$
obligándonos a la compra del 100% de repuestos, equipos y hasta rieles de
origen chino. Con mano de obra china por cláusula: “llave en mano”. Para ello
se reglamentó la ley de migraciones en 2010 admitiéndose el ingreso incluso de
chinos indocumentados.
En forma simultánea, la capitana del buque HMS Clyde, Catherine Jordan,
difundió por la BBC un video sobre los actuales ejercicios militares en la
zona, destacando que su misión es evitar que cualquiera que no sea “bienvenido
o invitado” ingrese al territorio.
¿Qué significan esas palabras transgresoras de toda norma internacional?
Significan que la “hipótesis de conflicto” está dramáticamente instalada en
nuestro espacio geográfico, entre el Estado chino y el imperio británico por la
posesión y control de los recursos argentinos.
El siglo XX marcó el uso británico de la red ferroviaria como drenaje de
nuestros rincones productivos hacia los puertos atlánticos y destinos
occidentales. ¿El siglo XXI se reafirmará con un drenaje ferroviario chino de
lo existente en nuestras regiones, por los puertos del Pacífico con destinos
orientales sin el mínimo valor agregado, y un reingreso de CHAFALONERÍA asiática
por la misma vía? Está en manos de nuestros gobernantes orientar en una genuina
acción productiva la reactivación ferroviaria que tanto deseamos y aplaudimos.
Un territorio donde los errores no se perdonan
Por Javier Cornejo
Artículo publicado en el diario El Tribuno el 02 de julio de 2012
La República Popular de China afianza, cada vez más, su protagonismo en la economía de Latinoamérica. En Argentina en particular.
Más allá de sobreactuaciones y sobre interpretaciones, incluida la visita de Wen Jiabao, su propósito concreto es celebrar un Acuerdo de Libre Comercio con el Mercosur, que arrasando las “restricciones morenistas”, se inicie por Argentina.
Esta iniciativa no resulta ni podría resultar neutra. A título de advertencia, en simultaneidad a tal visita, tres hechos pusieron un freno, un alerta, a las pretensiones orientales.
a) En Paraguay destituyen a Fernando Lugo. De inmediato asume Federico Franco, de afinado vínculo con Gran Bretaña, y cuenta desde el primer momento con el beneplácito de la embajada británica Asunción, que había sido restablecida 24 horas antes del juicio político.
b) En simultáneo, pero en Chubut, una supuesta protesta gremial se transforma en atentado y sabotaje de los “Dragones” en el sur argentino a un yacimiento de la firma Pan American Energy, un consorcio chino-
británico que genera el 17 por ciento del petróleo argentino. Poco antes, los británicos habían rechazado una oferta de compra de acciones efectuada por los chinos. Cuatro días más tarde, el ómnibus en que viajaban los gendarmes afectados a Cerro Dragón y murieron varios hombres e la fuerza. A partir de allí, la presidenta anunció el retiro de la Gendarmería de no precisadas tareas en las provincias. Cabe preguntar: ¿la frontera del narcotráfico quedará totalmente desguarnecida?
c) Una convocatoria de Hugo Moyano aglutinó la disconformidad de argentinos que “apoyaron mucho y participaron poco”.
Reunión Mercosur
En la reunión de Mendoza, Mercosur y Unasur bajaron los decibeles contra Paraguay. El país está excluido por ahora, pero no habrá sanciones. De todos modos, Asunción es la única capital que reconoce a Taiwán y ese el principal obstáculo para un tratado del grupo con China, que considera a la antigua Formosa o China nacionalista como un territorio propio. La Presidente pro- témpore se apuró a suavizar la cosa: “No se tomará ninguna sanción económica contra Paraguay”, adelantó Cristina Fernández de Kirchner. La energía de Yaciretá- Apipé fue.
Por otra parte el Presidente Franco le dedicó a la Presidente Argentina: “Voy a tener un trato especial con Cristina”. “No me sacarán una sola palabra contra ella” (La Nación 26-6-12).
La fragilidad
El equilibrio nacional e internacional en que se mueve la Argentina, sí debe decirse que exige “delicada sintonía fina”. Las primeras potencias del mundo, orientales y occidentales, no admitirán ninguna torpeza.
De todos modos, la fragilidad de Latinoamérica, en especial, de sus Estados, y los intereses de las potencias obligan a pensar el futuro con responsabilidad.
Hay intereses muy fuertes que se disputan el botín. Si se fracasa en la mesa de las negociaciones, ya lo demostraron a lo largo de la historia y tal como hoy ocurre en otros lugares de este mundo, no dudarían en construir un escenario bélico.
Nosotros, los argentinos no contamos. Ya fue reformada la Ley de Migraciones para que el ingreso chino nos pulverice.
Mientras tanto una cruda realidad se va expandiendo, tan solo a título enunciativo: cierre de Alpargatas, paralización de Renault, cierres de Carnes Pampeanas, Tileye SA despide empleados, Nucete cierra y despide 500 trabajadores, por Cerro Dragón más de 700 Pymes se paralizaron, 6.700 trabajadores no pueden volver al yacimiento, la construcción cae 8.8% con respecto al 5/11. En Salta, la actividad tabacalera también lo siente. La desaceleración avanza.(CAME 29-6-12).
Frente a ello las huestes morenistas que ya experimentaron el “paraíso fiscal” número 58 de Angola, se aprestan a incursionar en el “paraíso fiscal”de Azerbaijan con la Salada como modelo exportable argentino
Giro al Oriente
Por Javier Cornejo
Artículo publicado en el diario El Tribuno el 09 de julio de 2012
El informativo Russia Today del jueves 21 de junio
destacaba la reunión de la presidenta argentina, Cristina Kirchner, con el
presidente ruso, Vladimir Putin.
Tuvo lugar en Los Cabos (México) el 19 de junio, en ocasión de la última Cumbre
de los 20.
Los publicitados temas de tal reunión fueron: hidrocarburos, energía nuclear,
transporte, agricultura y agroindustria.
A los pocos días, Argentina fue visitada por el primer ministro chino, Wen
Jiabao, quien desarrolló una extensa actividad referida al rubro
agrícola-alimentario, recursos naturales en general, ferrocarriles.
Ni una sola palabra de “otros” temas.
Verdad develada
Pero, más allá de la agenda comercial desarrollada publicitariamente por la
Presidenta argentina con el jefe de Estado ruso y el premier chino,
paralelamente a la misma hubo “otra” agenda desplegada por un ministro
argentino.
El ministro de Defensa, Arturo Puricelli, en su tercer viaje a Pekín, esta vez
acompañado por el secretario de Asuntos Internacionales, Alfredo Forti, y una
comitiva compuesta por altos oficiales de las Fuerzas Armadas, abordaron otro
tipo de temas.
Para ello es preciso transcribir las palabras del señor ministro a los medios
de información: “A partir de los valiosos avances de la relación bilateral en
materia cultural, económica, comercial y política, mi visita a la República
Popular China viene a sumar a la Defensa como un componente importante e
integral en esta asociación estratégica de Argentina y China”.
Junto al jefe de la marina china, almirante Wu Shengli, fue recibido por el
vicepresidente de la Comisión Militar Central (la más alta entidad de
conducción política de la defensa china), Guo Buoxing, a efectos de la firma de
un memorándum de cooperación de asistencia tecnológica del país asiático para
sustituir el equipamiento naval de origen inglés con que cuenta nuestra Armada
nacional.
Malvinas
Con respecto al contundente respaldo chino a nuestro reclamo al Imperio
Británico sobre el tema insular y antártico, la agencia EFE publicita al
ministro argentino apoyando el reclamo chino por Taiwán. En una cooperación de
defensa sin igual, el ministro expresó: “Argentina y China establecieron un
nuevo punto de partida con vistas a la construcción de una verdadera asociación
estratégica bilateral de cooperación en Defensa”. “Con China compartimos desde
la concepción estratégica defensiva de nuestros instrumentos militares hasta
una visión cooperativa de la seguridad internacional”.
Mientras tanto, en Malvinas el artillado nuclear del Imperio Británico, sin
pausa y con más prisa, sigue inexorablemente su curso.
Mientras en esta punta del mundo, Rusia y China consolidan su presencia en
voraz apetencia de nuestros recursos naturales, en el otro extremo geográfico
empiezan a apartarse de Irán, dejándolo solo.
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