DEUDA: EL ARMA DE
ESCLAVIZACION PERPETUA
Por Javier
Cornejo
En distintos artículos de esta columna efectuamos
un seguimiento de la causa primigenia de nuestros males: La Deuda.
Constatamos que,
paradójicamente, con ella se logró una anestesia de todo el pueblo argentino.
La consideran
inocua. A nadie le interesa. Ni siquiera informarse.
Es como no querer
saber nada del cáncer que carcome nuestro cuerpo social.
Pareciera existe
una tácita voluntad suicida de no querer
curarnos.
En distintas
oportunidades se abordó el tema desde perspectiva propia y de prestigiosos
juristas e investigadores tales como Alejandro Olmos, Alejandro Olmos Gaona,
Javier Llorens, Dr. Julio González y un elenco de patriotas que desenmascararon
los fraudes que el gobierno, la oposición y la prensa cómplice nos presentan
como el “desendeudamiento de la década”.
Gran mentira. Es
falso.
LIC. HECTOR
GIULIANO
Dedicó sus
trabajos al seguimiento del tema de la deuda con una exactitud minuciosa. Nadie
pudo refutar una sola palabra, un solo dato de sus exposiciones, dedica su vida
a investigar su composición, evolución y consecuencias para los argentinos.
Hecha por tierra las mentiras del
gobierno kirchnerista, las palabras que contradicen cruentamente a los hechos.
A tales efectos
sintetizo los pasos de abdicación soberana en pos de la deuda perpetua de cada
uno de los argentinos, que con su sudor, trabajo y esfuerzo mantienen a los zánganos de la
colmena K y sus invitados de otras latitudes:
a.- Prórroga de
jurisdicción a Tribunales Extranjeros.
b.- Renuncia a
oponer inmunidad soberana.
c.- Exenciones
impositivas –presentes y futuras- a los acreedores, sin retenciones de ningún
tipo sobre pagos de capital e intereses.
d.- Paridad de
trato a los acreedores –pari passu- en la emisión de los nuevos bonos.
e.- Cláusula del
acreedor más favorecido, consistente en extender a todos los acreedores
cualquier mejora concedida a uno de ellos.
f.- Compromiso de
no hacer –negative pledge- consistente en el compromiso de no gravar activos
del Estado en favor de otros acreedores como garantía de disponibilidad de
bienes para el caso de embargos contra el país.
g.- Cláusula
Cross Default o incumplimiento cruzado, según la cual la falta de cumplimiento
de uno sólo de los servicios (capital y/o intereses) implica automáticamente la
mora y posibilidad de reclamo de todos los acreedores, disparando la
aceleración o exigencia anticipada de obligaciones.
h.- Cláusula de
Acción Colectiva o incorporación de la regla según la cual ante cualquier
problema futuro con los nuevos bonos emitidos rige el criterio que lo decidido
por la mayoría obliga también a la minoría de los tenedores.
Al decir de
Giuliano, “toda esta batería de cláusulas implica que la Argentina ha quedado atada de pies y manos en materia
legal frente a cualquier forma de incumplimiento de los nuevos bonos”.
Lo expuesto
sintéticamente es la realidad de lo efectuado por el gobierno de Néstor
Kirchner, con la responsabilidad del Ministro de Economía Roberto Lavagna, su
Secretario de Finanzas Guillermo Nielsen y que fuera ratificado y ejecutado por
Cristina Fernández con la reapertura del canje en el 2010 con la
responsabilidad del ministro de Economía Amado Boudou y Secretario Hernán
Lorenzino. Llegando al paroxismo del
actual Ministro de Economía que se jacta de emitir Nuevos bonos 2015 que pagan un obsceno 18% anual en U$S).
De allí que es
imprescindible:
1.- Blanquear el
default de la deuda pública
2.- Abrir una
auditoría integral de la deuda. Investigarla para determinar su grado de
legitimidad.
3.- Una vez determinada
la deuda “Legítima” y la capacidad real de pago del Estado proceder a una
reestructuración forzosa y no voluntaria de toda la deuda.
Todo otro camino
es tomar más deuda para pagar deuda, en la calesita del “endeudamiento
perpetuo”.
BURLA A LA
INVESTIGACION DE LA DEUDA EXTERNA
Por Javier
Cornejo
Por Ley 26.984,
Título II Capítulo Único, art. 12, se
crea una Comisión Bicameral Permanente de Investigación del Origen y Seguimiento de la Gestión y del Pago de la Deuda Exterior de la Nación.
Su finalidad es:
“investigar y determinar el origen, la evolución y el estado actual de la deuda
exterior de la República Argentina desde el 24 de marzo de 1976 hasta la fecha,
incluídas sus negociaciones, refinanciaciones, canjes, megacanjes, blindajes, los
respectivos pagos de comisiones, default y reestructuraciones, emitiendo
opinión fundada respecto del efecto de los montos, tasas y plazos pactados en
cada caso, y sobre las irregularidades que pudiera detectar”.
Entre sus
funciones se establece la “presentación de un informe final respecto de los
temas comprendidos en el presente artículo, para ser considerado por ambas
Cámaras dentro del plazo de 180 días a partir de su constitución.”
Su integración
debería haberse conformado con 8 senadores y 8 diputados, circunstancia que
nunca ocurrió, por lo que se prevé que su inacción está garantizada.
Tomando las
palabra del Lic. Héctor Giuliano, quien realiza permanentemente un exhaustivo
análisis de la temática referida a la Deuda (externa e interna) Argentina:
“Quien no investiga delitos sobre los que hay evidencia cierta y comprobada es,
en principio cómplice de esos delitos”.
El actual
gobierno kirchnerista siguió con la línea de conducta de los gobiernos de turno
que lo precedieron de evitar el tema, con el agravante que ante la creación de
la Comisión referida, optó por realizar una serie de acciones distractivas a
efectos de en la práctica neutralizar cualquier intento serio de investigación.
Para ello esgrime
el argumento que “no se ha cumplido el objetivo de la ley al fracasar el
intento de cambiar a la jurisdicción local el pago a los bonistas del
Mega-canje Kirchner –Lavagna de 2005-2010”, de allí que “existen fuertes
presiones de los sectores financieros para que esta Ley 26.984 sea derogada, o
bien permanezca –como hasta ahora- en un abierto incumplimiento por parte del
mismo Congreso que la votó y que lo obliga a sí mismo”.
OPERATORIA
La operatoria que
se aplica para evitar el cumplimiento de esta ley y no constituír la Comisión
Investigadora que se ordena, es distraer a la opinión pública con “proyectos de
investigación” aleatorios y superpuestos que más que intentar una genuina
investigación y juzgamiento de responsable, son maquillajes que finalizan en
una entelequia en la que toda culpabilidad es diluida en eternos procesos que
no conducen a nada.
Entre tales
proyectos se enrolan los que están en tratamiento legislativos como el del
diputado Héctor Recalde que propone la creación de una “Comisión” pero, para
investigar sólo la complicidad de grupos económicos privados en la época del
Proceso Militar (1976-1983). No obstante y mientras tanto, el Ejecutivo arregla
el pago de la Deuda con el Club de París que indiscutiblemente fue contraída en
tal época. Las contradicciones son evidentes.
Está también la
propuesta del Jefe de Gabinete Jorge Capitanich que pide la constitución de una
Comisión para investigar “maniobras vinculadas al sector privado, identificar
la operaciones de lavado de activo, maniobras especulativas, impacto a la ley
penal y precios de transferencia”.
Otro referido a
investigar “Cuentas no declaradas de argentinos en Suiza”, superponiendo una
tarea propia de la AFIP.
De tal manera un
gobierno que es responsable directo de la abdicación soberana argentina,
reafirmando lo expuesto por el Lic. Giuliano: “enmascara su responsabilidad con
un discurso confrontativo inverso a las acciones que adopta y que confunde a la
población con proyectos superpuestos que apartan el eje de atención del
problema central y absoluto: La Deuda”.
De tal manera se neutraliza, y en la práctica es una
burla, al cumplimiento de la norma de la creación de una Única
¿CUÁNTOS MILLONES
DE U$S DEBEMOS?
Por Javier
Cornejo
Como es tradición
en el “relato” gobernante, existe una falta de información en todo dato
estadístico y si en algunos casos se accede a ella, el riesgo que haya sido
manipulada es una constante.
Los “números” de la deuda argentina, no son
una excepción a lo expuesto.
Es preciso destacar que la paciente y laboriosa investigación
del Lic. Héctor Giuliano, no perdió el hilo conductor, despejando los datos para poder tener un
cuadro completo, real y desagregado de la grave situación del endeudamiento
argentino.
INFORME OFICIAL
A efectos de
tener un punto comparativo válido, es preciso referenciar que el golpe del 24
de marzo de 1976 entre sus justificados sostuvo la importante deuda argentina,
en ese momento de 5.500 millones de dólares, con más aproximadamente otros
1.000 millones de dólares de “deuda interna”.
El saldo
“oficial” proporcionado por el Ministerio de Economía a la tarde del último día
del año 2014 sobre el saldo al 30-06-2014
es de:
198.900 millones de dólares. Es decir 193.400
millones de dólares más que lo adeudado por el país al exterior en el año 1976.
Al decir de
Giuliano, el monto informado es muy incompleto para tener una comprensión del
peso real del endeudamiento, porque a esa deuda deben agregársele:
12.000 millones
de dólares de los Holdouts.
77.000 millones
de dólares de interés a pagar.
15.000 millones de dólares de cupones de PBI
Son 104.000
Millones de dólares más que se deben adicionar con lo que da un total de 303.000
millones de dólares.
A lo referido se
debe agregar: los ajustes por indexación según CER y por tipo de cambio dólar,
cupones PBI, juicios contra el Estado con sentencia firme, demandas ante el
CIADI (aproximadamente 10.000 millones de dólares), pasivos de las Provincias y
Municipios, BCRA, Deuda Pública Indirecta
(Empresas del Estado, Organismos Nacionales, Fondos Fiduciarios).
La Presidente se
autodefine como “pagadora serial”, protagonista del “ gran desendeudamiento de
la década”, no dice que los pagos se realizaron con la succión realizada a cada
argentino aportante y por la operatoria que bien puede denominarse como de
“canibalismo financiero” al haber efectuado que el Estado Argentino se trague
la mayor parte de su “propia deuda” a través del pasaje de la Deuda con
Terceros a Deuda Intra Sector Público, es decir que el gobierno paga su Deuda
Externa a costa de pasarle “el muerto” de la Deuda Impagable a la ANSES (que es
la caja de los jubilados), al BCRA (que es la alcancía de las divisas del Estado),
al BNA (que es el principal banco oficial
del país) y a una pluralidad de organismos nacionales , después de
cumplido todo este trabajo sucio de descongestión del stock de la deuda con
Organismos Financieros Internacionales y con Acreedores Externos Privados a
costa de aumentar en gran escala la DEUDA INTRA ESTADO, el gobierno cumple la
denominada “hoja de ruta Boudou” y el frustrado Megacanje Kirchner Lavagna de
2005-2010 que es volver al Mercado Internacional de Capitales, obviamente, para
tomar más DEUDA.
Esta vez, con
garantía territorial dejando expedita la puerta de un futuro “Canje de Deuda
por Territorio”.
Giuliano nos
reafirma: “La Deuda Pública es un Sistema y, como tal, está diseñado para su
continuidad, para su perpetuidad vía refinanciaciones permanentes”.
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