La
República Argentina sufrió los dos peores ataques terroristas de su historia en
1992 y 1994: las voladuras primero de la Embajada de Israel, y luego de la sede
de la mutual judía AMIA.
Pasaron
dos décadas y aún no se sabe quiénes fueron los responsables de ambos horrendos
ataques que dejaron casi 200 muertos. Ahora, las explosivas declaraciones de un
ex-embajador israelí aportan nuevos indicios sobre lo que posiblemente hayan
sido dos ataques de bandera falsa promovidos por el sionismo.
Yitzhak
Aviran, ex-embajador de Israel en la Argentina entre1993 y 2000, reveló el
pasado 2 de enero que agentes israelíes habían enviado “al otro mundo” a los
terroristas responsables por el ataque contra el edificio de la AMIA – que
también era sede del poderoso lobby pro-Israel DAIA / Delegación de
Asociaciones Israelíes Argentinas. En sus propias palabras:“La gran
mayoría de los culpables ya está en el otro mundo, ¡y eso lo hicimos nosotros
(Israel)!”.
El
significado está claro: los terroristas fueron supuestamente ejecutados por
Israel aunque el Sr. Aviranno dio nombres ni pruebas de ello. Nofue
ninguna sorpresa que inmediatamente el gobierno israelí emitiera un comunicado
negando todos sus dichos:“las declaraciones del ex-embajador Aviran,
retirado desde hace quince años, están totalmente desconectadas de la
realidad. Sus declaraciones fueron hechas sin conocimiento ni
autoridad. Son puras fantasías y bajo ninguna circunstancia reflejan la
verdad detrás de los eventos que procuró describir. Israel continúa
prestando su colaboración de manera totalmente transparente a la Argentina en
la investigación de estos ataques”.
El
canciller argentino Héctor Timerman – él mismo judío de izquierdas e hijo de un
periodista perseguido por el setentista régimencívico-militar que, apoyado por
EEUU, usurpó el poder en la Argentina – señaló que las declaraciones del ex
embajador Aviran reflejan “la venganza y ejecuciones clandestinas
israelíes”,y que podían explicarse como consecuencia de la oposición de
Israel al “Memorando de Entendimiento” suscripto entre Argentina e Irán hace un
año con el objeto de esclarecer de una vez por todas quiénes fueron los
verdaderos responsables del ataque contra la sede de la AMIA en 1994.
Timerman
dijo que los dichos de Aviran“son de una extrema gravedad” porque demuestran
que se “ocultó la información a la Justicia argentina, impidiendo que surjan
nuevas evidencias al esclarecimiento del caso”.
La
“verdad”es lo que yo digo que es…
Las
investigaciones realizadas en la Argentina sobre ambos ataques terroristas, hoy
nos llegan colmadas con dos décadas de corrupción acumulada bajo sucesivos
gobiernos “democráticos”; comenzando con el de Carlos Menem – presidente al
momento de ambos ataques – siguiendo con los presidentes Fernando De la Rúa,
Eduardo Duhalde y Néstor Kirchner; hasta la actual presidencia de Cristina
Kirchner.
Desde el
preciso instante de ambas explosiones, la Argentina – un país debilitado y
derrotado – no pudo resistir las constantes interferencias y distorsiones
impuestas por Estados Unidos e Israel, países que inmediatamente impusieron sus
propios objetivos e intereses geopolíticos consistentes en crear un casusbelli
contra sus enemigos en Medio Oriente, especialmente Siria e Irán. Esa
presión fue permanentemente ejercida por sus embajadas locales ya través de
operaciones clandestinas realizadas por el FBI, laCIA, NSA, el Mossad, Shin
Beth y otros entes y operadores, siempre bajo el disfraz de “ayudar con las
investigaciones”.
Así, se
inventaron inexistentes coches-bomba; se falsificaron “conexiones” sirias e
iraníes; mientras en esos veinte años ambas Causas fueron paseadas por las
manos de siete jueces federales, débiles y corruptos.
Uno de
ellos -el juez federal Juan Galeano, hoy destituido – llegó al extremo de
permitir que en el caso AMIA el entonces presidente de la DAIA, Ruben Beraja
(luego procesado y encarcelado por la quiebra fraudulenta del Banco
Mayo),pagara un soborno de u$s 400,000 a un traficante de automóviles llamado
Carlos Telleldín para que diera falso testimonio que permitiera armar la teoría
del “coche-bomba” y una inexistente “conexión siria” que conduciría a una
“conexión iraní…”
“Coche-bomba”que
en el caso AMIA se basó sobre un pequeño trozo de metal portando un número de
serie que fuera “afortunadamente” hallado entre los escombros del edificio ¡por
un oficial de inteligencia militar israelí!! (…casi nos recuerda otro hallazgo
“afortunado”: el del pasaporte intacto de “terrorista-suicida” Mohamed Atta
entre los escombros de las Torres Gemelas por el FBI…)
De todas
formas, los años se convirtieron en décadas y la cambiante política
norteamericana en Medio Oriente, especialmente hacia Irán, colocaron a los
sucesivos gobiernos de la débil y estructuralmente corrupta Argentina bajo
enormes presiones ante los embates de las fuerzas combinadas del Departamento
de Estado, la CIA, Mossad, DAIA, AMIA, los grandes multimedios locales e
internacionales, y los lobbies sionistas que empujaron y zamarrearon a la
Argentina de acá para allá cual corcho en alta mar…
Un
ejemplo: cuando los Neoconservadores de George W Bush buscaban desesperadamente
armar su cassusbelli contra Irán, aprovecharon la visita del entonces
presidente argentino Néstor Kirchner a Nueva York en septiembre 2006 para
armarle unareunión privada en el Hotel Waldorf-Astoriacon los máximos
dirigentes de ocho poderosas organizaciones sionistas mundiales.
Éstas
rápidamente lo convencieron a él, a su canciller Jorge Taiana, y a la entonces
primera dama/senadora nacional/pronto-a-convertirse-en-presidente Cristina
Kirchner, que la Argentina DEBIA acusar a Irán de haber planeado
y ejecutado el ataque a la AMIA.
Se nota
quea los Kirchner les hicieron un ofrecimiento al que no pudieron rehusarse,
pues inmediatamente nombraron fiscal para el caso AMIA a Alberto Nisman, un
sionista fanático que raudamente emprendió viaje a Washington DC (¿a Langley?)
desde donde regresó a Argentina con “pruebas” que sindicaban al ex-presidente
iraní Alí Rafsanjani y ocho de sus ministros de haber planeado, financiado y
organizado el ataque a la AMIA a través de Hezbollah.
Esa
acusación tremendamente irresponsable a la que se prestó Kirchner equivalía a
una virtual declaración de guerra contra Irán pero… no hubo que preocuparse
pues el Poderoso George W Bush respaldaba a los Pequeños Kirchner en esa
“patriada…”
El fiscal
“argentino” Nisman llegó al extremo de brindar un informe completo y detallado
de su caso contra Irán ante la Corte Suprema de Justicia….¡de Israel!
Que una
obscena falsificación semejante terminara siendo insostenible colocando a la
Argentina bajo aún mayor presión, era de esperarse….
Obama
salva a Cristina
Por
suerte para Cristina Kirchner el salvavidas le vino cuando Barack Obama (o
debiéramos decir el Establishment Militar norteamericano) decidió moderar su
política hacia Irán, para desesperación y cuasi-colapso nervioso de Benjamín
Netanyahu y sus secuaces Sauditas.
Pues,
efectivamente, a principios del año pasado Obama le hizo un sutil guiño de ojo
a Cristina dándole luz verde para moderar las groseras acusaciones argentinas
contra Irán y procurar un “diálogo más amistoso”. Cristina inmediatamente
le ordenó al canciller Timerman iniciar un acercamiento con Irán, lo que
condujo a la firma del “Memorando de Entendimiento” argentino-iraní cuyo
objetivo es descubrir quiénes fueron los verdaderos culpables del ataque
terrorista contra la sede de la AMIA.
¡El
griterío y la rasgadura de vestiduras en la DAIA, AMIA, OSA, el Congreso
Mundial Judío, Embajada Israelí, AIPAC y los multimedios locales controlados
por el sionismo – con “Clarín” y “La Nación” a la cabeza – no se hicieron
esperar!
El
“Memorando de Entendimiento” incluye la creación de una “Comisión de la Verdad”
integrada por representantes de cinco países para llegar al fondo de la
cuestión: dos países serán elegidos por Argentina, dos por Irán y un quinto
país árbitro será elegido de mutuo acuerdo.
La enorme
y obvia pregunta es la siguiente: si el fiscal sionista argentino Alberto
Nisman, el juez que hoy entiende en la causa Rodolfo Canicoba Corral y todos
los poderosos lobbies sionistas locales e internacionales disponen de “las
pruebas sobre quienes son culpables del ataque a la AMIA”, ¿para qué
necesitamos ahora una “Comisión de la Verdad”?
Si los
enemigos de Irán disponen de “pruebas” que podrían esgrimir como excusa para
atacar y destruir a Irán – como ya hicieron con Irak, Afganistán, Libia y Siria
– ¿entonces por qué no presentan esa “evidencia y pruebas” ante el mundo?
La
genuina y horrible Verdad es muy diferente. El ataque contra la sede de
la AMIA de 1994 tiene todas las características de un ataque de falsa bandera
israelí contra la Argentina. Se produjo en momentos en que se dirimía una
intensa guerra intestina y sorda dentro de Israel por sectores de la
ultraderecha fundamentalista racista sionista que exigían el desplazamiento del
partido laborista israelí entonces en el poder.
El autor
describe esto en mayor detalle en una entrevista realizada en octubre 2009 con
el Dr.Jim Fetzer, co-fundador de“Académicos por la Verdad sobre el 11 de
Septiembre”, dentro del marco de las tácticas sionistas en materia de ataques
de falsa bandera: http://www.voltairenet.org/article162701.html
El
bombazo contra la AMIA cobra nueva dimensión si se lo inserta dentro de la
cronología de hitos que ocurrían en Israel por aquellos años, especialmente
luego que el laborista Yitzhak Rabin se convirtiera en primer ministro en 1993
iniciando una política de búsqueda genuina de una paz justa y duradera con los
palestinos.
Por
ejemplo, el 1ero de julio de 1994 Rabin permitió a Yasser Arafat regresar a su
Patria Palestina luego de largo exilio, lo que generó gran furia entre
sionistas de ultraderecha. Dos semanas más tarde, se produce el atentado
contra la sede de la pro-laborista AMIA en Buenos Aires. El clímax de
este complejo proceso vendría el 4 de noviembre de 1995 cuando el primer
ministro Rabin es asesinado en las calles de Tel-Aviv. ¿Por un
fundamentalista musulmán? No… ¿Por algún Neonazi?
Tampoco…
Sino por
un tal Amir Ygal, miembro del ala ultraderecha fanática del movimiento de
asentamientos ilegales israelíes vinculado al Shin-Beth, ente de seguridad
interna que Rabin estaba reorganizando pues la consideraba“fuera de control…”
Falsificando
la Realidad
El diario
“La Nación” de Buenos Aires informó que “Un alto funcionario de la
Cancillería contó que hubo un diálogo con un representante del máximo nivel de
Israel en el que éste decía: “Ya está la culpabilidad de Irán, ¿para qué
quieren seguir investigando?”.
¿Esas son
las famosas “pruebas”?¿De quiénes? Del Mossad? ¿De la CIA?
¿Del Depto. de Estado?¿De la DAIA y la AMIA…??
El
ex-embajador Aviran no solo se disparó un tiro en el pie con sus imprudentes
declaraciones, sino que también hirió a la DAIA, la AMIA, Israel, Nisman y todo
el lobby sionista que al unísono siguen insistiendo que un conjunto de
funcionarios iraníes – hoy todos vivos – son los culpables de la voladura de la
AMIA, por lo que deben ser capturados y enjuiciados. ¿Pero cómo puede
todo esto ser cierto si el embajador Avirán nos acaba de informar que “Israel
los mató a todos”?
También
resulta interesante observar que en marzo de 2010, otro ex-embajador israelí en
Argentina, Daniel Gazit, dijo algo parecido al diario Perfil:“Sabemos quién
estuvo detrás del atentado contra la Embajada de Israel, quién lo organizó,
quién dio las órdenes y quién lo hizo, con nombres y todo.”
Luego del
atentado de 1992 contra la Embajada, diversos expertos concluyeron que hubo una
implosión o detonación interna; que no hubo ningún“coche-bomba”,pues algo adentro
del edificio fue lo que explotó con consecuencias catastróficas (¿algún arsenal
clandestino israelí en pleno centro de Buenos Aires, quizás?).
En
aquellos días, el Embajador Aviran se comportaba como el proverbial niño
malcriado de cinco años que explota en un ataque de gritos cada vez que no le
dan lo que él quiere.
Expertos
de la Academia Nacional de Ingeniería de la Universidad de Tucumán produjeron
un informe para la Corte Suprema de Justicia en el que concluían que la
explosión fue interna.
¡Entonces,
el embajador Aviran calificó a la Universidad de ser antisemita, a los peritos
ingenieros de ser antisemitas, a la Corte Suprema de ser antisemita y a su
presidente, el Dr. Julio Nazareno, de ser antisemita…!
No fue la
primera vez que Israel traiciona a la Argentina
Argentina
tiene un triste historial de ofrecer su amistad a Israel más rara vez ha
recibido reciprocidad por parte de Israel. Argentina, país tolerante y
pacífico, ha sido excepcionalmente complaciente con la muy pequeña – 0,5% de su
población -pero extremadamente ponderosa comunidad judía en Argentina.
Incluso
en 1949,siendo Juan Perón presidente, Argentina fue el primer país sudamericano
que reconoció oficialmente al Estado de Israel.
Cuando en
1961 el gobierno argentino invitó oficialmente a funcionarios israelíes a
participar de las celebraciones por el 150 Aniversario de su Independencia, la
aeronave Bristol Brittannia de El-Al ocultó un contingente clandestino de
tropas de élite del Mossad/Shin Beth que aprovecharon para secuestrar a un
residente argentino de nombre Ricardo Klement – también conocido como Adolf
Eichmann – sacándolo ilegalmente del país para llevarlo a la fuerza a Israel
donde fue “juzgado” y ejecutado.
Argentina
radicó una enérgica protesta ante las Naciones Unidas, cuya Resolución 138
ratificó que Israel había vulnerado la soberanía argentina pero…– como dijimos
al principio – Argentina es un país demasiado débil para hacerle frente a las
naciones poderosos con sus tácticas al estilo de Don Corleone.
El Caso
Eichmann no deja de ser revelador. Este oficial alemán de las SS hablaba
fluidamente el yiddish y hebreo, y participó intensamente durante la Segunda
Guerra Mundial en negociaciones entre la Alemania de Hitler y organizaciones
sionistas en pos de un objetivo en común: hacer salir a la mayor cantidad
posible de judíos de Europa.
Efectivamente,
los sionistas querían que los judíos europeos fueran trasladados a Palestina
controlada por Inglaterra… ¡y los alemanes también!
Imagínense:
¡las SS-Nazis y los Sionistas trabajando hombre-a-hombro durante la Segunda
Guerra Mundial!
¡Qué
embarazoso que hubiera sido si Eichmann hubiera decidido publicar sus memorias
de guerra! Mejor entonces que el Mossad lo secuestrara en la débil
Argentina y lo despacharaa Tel-Aviv dónde pudo ser linchado legamente.
Así es
como opera la telaraña del Poder Global Sionista integrado por el Mossad, CIA,
Departamento de Estado, DAIA, AMIA, Congreso Mundial Judío, AIPAC y un enjambre
de entidades sionistas…
Notablemente,
la mismísimatáctica terrorista de volar edificios públicos con sus ocupantes
adentro en pleno centro de una ciudad, tiene su primer antecedente en la
Organización terrorista sionista “Irgun Zvai Leumi” que en julio 1946 voló el
Hotel Rey David, sede del gobierno militar británico en Palestina, dejando casi
100 muertos.
El jefe
guerrillero que perpetró aquél ataque fue un terrorista de nombre Menachem
Begin, que luego se transformaría en primer ministro israelí y ganaría un
Premio Nobel de la “Paz…”
Hmmm!
¿No habrá que rever el ataque a las Torres Gemelas bajo esta nueva óptica?
Adrian
Salbuchi, Fundador,
Proyecto Segunda República (PSR) – 13-Enero2014
Adrian
Salbuchi es analista político, autor, conductor del programa de televisión
“Segunda República” por el Canal TLV1 de Argentina. Fundador del Proyecto
Segunda República (PSR) – www.proyectosegundarepublica.com
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