A continuación de este breve artículo se exponen dos más donde ya habíamos anticipado este desenlace, haciendo un seguimiento lógico y pormenorizado de los acontecimientos políticos y de inteligencia, que muchos periodistas de nuestro medio menosprecian y descartan por parecerles absurdos.
He aquí nuestra prognosis:
Qatar y Arabia Saudita dejan de
apoyar a los “rebeldes sirios”: Assad permanecerá en su puesto y llega la paz
Aquí lo
tenéis: la paz en Siria está a la vuelta de la esquina.
Una
fuente tan
acreditada como Thierry Meyssan confirma mi impresión inicial de que
el nuevo Emir de Qatar (que derrocó a su padre) ha dejado de apoyar a los
Hermanos Musulmanes/ Al Qaeda y ello ha propiciado el golpe de estado en Egipto
(y puede que pase lo mismo en Libia y Túnez, ojo).
La
diplomacia norteamericana está jugando muy diferente, sin duda influida por el
ministro de defensa Chuck Hagel, y ahora parece estar aliada con Putin, que se
convierte en el nuevo hombre fuerte de la región.
En este
excelente artículo, Thierry Meyssan explica el cambio de posición del gobierno
de Arabia Saudita, que ha dejado de apoyar a Al Qaeda, con lo que la paz va a
llegar a Siria ¡rápidamente!
La
situación se está revirtiendo a una velocidad de vértigo y, una vez que se
aclare la situación, la pregunta será: ¿cuánto tiempo tardará Siria en atacar
las posiciones israelitas en los Altos del Golán?
Como
veréis, el Planeta está experimentando un giro de 180º…(¿Polos magnéticos?).
¿AL-ASSAD EN CAMINO DEL TRIUNFO?
Artículo publicado en el diario El Tribuno el 29-07-2013
Por Javier Cornejo
Pasó un año y constatamos que los “rebeldes” elevados por Occidente a la categoría de “héroes” en su lucha contra el ejército sirio, que es contra el pueblo sirio abroquelado en torno a su presidente, hoy son abandonados por el secretario de Estado de los Estados Unidos. John Kerry los trata de “terroristas fanáticos y asesinos” y desmiente que Al - Assad haya utilizado armamento químico.
En otras palabras, parecen suspendidas las intenciones de derrocamiento del presidente sirio.
¿Qué pasó en el medio?
En Irán ganaron las elecciones el ayatola Khamenei y el jeque Rohani, quien asumirá a fines de agosto con un compromiso de diálogo con Occidente. Es el eclipse de Ahmadinejad.
En Siria el 80 por ciento de la población respalda a su presidente. El ejército sirio se encuentra más fuerte que nunca junto al pueblo. Paralelamente los “rebeldes de la liberación” se encuentran trenzados en una matanza entre ellos, en creciente descontrol. El campo de batalla ahora tiene como protagonistas esenciales al “ejército libre” y al frente “al - Nusra”.
No las tropas de Damasco
Aparentemente a fines de 2012 hubo un cambio de planes anglo americanos; traicionando a Francia, se negaron a suministrar armamento pesado a los rebeldes. Se trata de armamentos con la capacidad necesaria de hacer frente al ejército de Damasco; sólo les entregaron armamento liviano para “controlar” el poder de fuego, lo que desembocó en encarnizados enfrentamientos entre los mismos rebeldes.
Al - Assad, junto a su pueblo y su ejército, comenzó la barrida de opositores, bajo la “vista gorda” de los EEUU, que está preocupado por la próxima reunión en Ginebra donde tendrá lugar una nueva actualización del reparto geográfico islámico, en la que Rusia aparece como un jugador decisivo y sacan a Francia del medio.
Por lo pronto, Siria parece avanzar hacia un triunfo bélico y diplomático, a la par que Occidente abandona a los rebeldes en su matanza “sin razón” entre ellos mismos. Frente a este panorama, Israel a través de su embajador ante la ONU (Ron Prosor), el pasado 23 de julio acusó el golpe al sostener: “si continúan las provocaciones por parte del gobierno sirio, Israel no tendrá más remedio que actuar en consecuencia”. Fue una clara alusión para empujar a los EEUU a involucrarse en una beligerancia de la que decidieron sustraerse.
Habrá que conocer cuál es el acuerdo entre los anglo - americanos y Rusia para dar tan decisivo paso en el Levante y Norte de Africa. Es muy posible que antes de fin de año asistamos a un nuevo reordenamiento de la geografía islámica que hoy conocemos.
Aparentemente Siria ya pactó su beneficio.
El apuro de la ONU en Siria
Autor Javier Cornejo
“Actúen ahora para detener la matanza en
Siria”. Esa fue la orden de Ban Ki-moon el pasado 25 de julio. El
secretario general de la ONU, que supuestamente representa el orden y la
paz en el mundo, no parece estar dirigiendo su urgencia a
organizaciones samaritanas o confesionales que detengan la masacre
referida. Máxime en momentos que la Cruz Roja Internacional anuncia su
retiro de Siria. El llamado está dirigido a las fuerzas extranjeras que
incursionan en Siria para derrocar a su presidente por mandato de
Occidente.
El apoyo a la “oposición” es claro y sin disimulos: ya anunciaron el ingreso de más de 2.000 “revolucionarios o contras”, que cuentan con el apoyo de la Casa de Saud, de Arabia Saudita, y de Qatar como el “Ejército Libre”, organizado por el Club Amigos de Siria. Gran parte de esa insurrección contra la dinastía entronizada en el poder de Damasco está formada por mercenarios financiados por sudíes y qataríes.
El objetivo militar consiste en aniquilar al Ejército sirio. El objetivo político es garantizar la instalación de una “democracia occidental”. El derrocamiento de Bashar al Assad es el pretexto “humanitario” de una estrategia asimilable a la que se aplicó en Irak, en 2003.
El mayor centro comercial sirio, la ciudad de Aleppo, es el escenario de las acciones en estas horas.
La capital, Damasco, con sus 6 millones de habitantes, se encuentra expectante, guarda el luto del reciente atentado a su corazón que decapitó su cúpula militar, con la calma que presagia la hectombe.
Vulnerabilidad religiosa
La Gran Mezquita de Damasco, símbolo de la civilización damascena es el lugar donde durante siglos todas las diferentes religiones rezaron juntas. Allí están las reliquias, la cabeza de San Juan Bautista, considerado por los judíos como uno de los suyos, y por los musulmanes y cristianos como su profeta. Hoy está amenazada ediliciamente por su cercanía con el edificio de la TV estatal siria, que, como se sabe, la OTAN lo tiene como primer objetivo a destruir.
Por otra parte, el real programa del llamado “Ejército Libre” es que al destruir al Ejército sirio pone fin a este tipo de sociedad religiosa implantándole a dicha geografía la constitución occidental para el “día después de la madre de todas las batallas”, constitución que ya se encuentra redactada en Washington.
Tal como se desprende de las declaraciones del subsecretario de Asuntos Públicos del Departamento de Estado, Mike Hammer: “EEUU junto a sus aliados está tratando de crear las condiciones que conduzcan a un rápido colapso del régimen sirio y se está concentrando en la preparación de su población para la inevitable caída de su presidente”.
El tsunami de la grotescamente llamada “primavera árabe” se encuentra arrasando la civilización.
El final del objetivo es la mundialización de la fuerza gendarme de los EEUU, el control financiero y un reordenamiento poblacional en todo el planeta. De este tsunami que parece tan lejano, nuestro país no está excluido, debido a la riqueza de nuestros recursos, la escasa cantidad de habitantes por kilómetro cuadrado y la avasallante destrucción institucional, educacional-cultural y espiritual.
El apoyo a la “oposición” es claro y sin disimulos: ya anunciaron el ingreso de más de 2.000 “revolucionarios o contras”, que cuentan con el apoyo de la Casa de Saud, de Arabia Saudita, y de Qatar como el “Ejército Libre”, organizado por el Club Amigos de Siria. Gran parte de esa insurrección contra la dinastía entronizada en el poder de Damasco está formada por mercenarios financiados por sudíes y qataríes.
El objetivo militar consiste en aniquilar al Ejército sirio. El objetivo político es garantizar la instalación de una “democracia occidental”. El derrocamiento de Bashar al Assad es el pretexto “humanitario” de una estrategia asimilable a la que se aplicó en Irak, en 2003.
El mayor centro comercial sirio, la ciudad de Aleppo, es el escenario de las acciones en estas horas.
La capital, Damasco, con sus 6 millones de habitantes, se encuentra expectante, guarda el luto del reciente atentado a su corazón que decapitó su cúpula militar, con la calma que presagia la hectombe.
Vulnerabilidad religiosa
La Gran Mezquita de Damasco, símbolo de la civilización damascena es el lugar donde durante siglos todas las diferentes religiones rezaron juntas. Allí están las reliquias, la cabeza de San Juan Bautista, considerado por los judíos como uno de los suyos, y por los musulmanes y cristianos como su profeta. Hoy está amenazada ediliciamente por su cercanía con el edificio de la TV estatal siria, que, como se sabe, la OTAN lo tiene como primer objetivo a destruir.
Por otra parte, el real programa del llamado “Ejército Libre” es que al destruir al Ejército sirio pone fin a este tipo de sociedad religiosa implantándole a dicha geografía la constitución occidental para el “día después de la madre de todas las batallas”, constitución que ya se encuentra redactada en Washington.
Tal como se desprende de las declaraciones del subsecretario de Asuntos Públicos del Departamento de Estado, Mike Hammer: “EEUU junto a sus aliados está tratando de crear las condiciones que conduzcan a un rápido colapso del régimen sirio y se está concentrando en la preparación de su población para la inevitable caída de su presidente”.
El tsunami de la grotescamente llamada “primavera árabe” se encuentra arrasando la civilización.
El final del objetivo es la mundialización de la fuerza gendarme de los EEUU, el control financiero y un reordenamiento poblacional en todo el planeta. De este tsunami que parece tan lejano, nuestro país no está excluido, debido a la riqueza de nuestros recursos, la escasa cantidad de habitantes por kilómetro cuadrado y la avasallante destrucción institucional, educacional-cultural y espiritual.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario